jueves, 5 de junio de 2008

Sesión 31-05-08

ANTERIORMENTE, EN NEVERFIELD
Fred "Fess" Fesster (mira la cámara del prisma: sólo hay cenizas): ¡Definitivamente hemos dejado atrás el Neverfield según N´Goth! ¡Pero está claro que éste tampoco es nuestro mundo!

CUATRO JÓVENES EMBARCADOS EN UN EXPERIMENTO SIN CONTROL
Danny Dalton: ¡Joder, Profe! Dimos el salto donde usted dijo. ¿Qué cojones ha salido mal?
Profesor Vanister (justo antes de morir acribillado): Un momento… ¡Claro! ¡Eso es! ¡Ya sé cómo regresar!

UN VIAJE A TRAVÉS DE DIMENSIONES ALTERNATIVAS
Leonard Powell II: No sé como sería en vuestro mundo, Danny. Pero aquí "Perro Loco" es el nuevo líder de los Wakane... y quiere la furgoneta.

UN OCÉANO DE MUNDOS POSIBLES...
Danny Dalton: Así que en esta dimensión, Leonard, tú y yo volvimos sanos y salvos.

ENTRE ELLOS Y SU HOGAR

Episodio 13.- NEVEREND (Parte 3)

Los llamaban "la santísima trinidad". Sam Wayne, Billy Whitehouse y Ben Braddock: los tres ases de los "Springfield Raiders". De eso hace poco más de un año. Ahora, Sam Wayne no es más que un lisiado alcohólico, con una carrera deportiva tan destrozada como sus rodillas. Billy Whitehouse se marchó a Nueva York, con una beca de estudios. Y Ben Braddock era la joven promesa del que ahora era el equipo de fútbol de una prometedora ciudad.

Sin embargo, en estas últimas 48 horas Ben ha descubierto que su mundo no es como él creía que era.

Ha descubierto que bajo las industrias Powell se esconde un complejo militar. Ha descubierto que su madre fue asesinada por el sicario de Devon Powell, Morgan Kyle. Y que los Wakane, al mando de "Perro Loco" Washington, llevan mucho tiempo organizando ataques terroristas contra el proyecto en el que trabajan los militares.

Y para que Ben descubra todo eso, han tenido que llegar ellos. Ellos son Danny Dalton, Leonard Powell y Fred Fesster... o al menos sus versiones de otro mundo. Un Springfield alternativo en el que las cosas eran diferentes.

Ahora, con la ciudad bajo la ley marcial tras los ataques de los Wakane y con nuestros protagonistas en manos de los militares... la inesperada llegada de los dos Danny Dalton (el de ésta y el de la "otra" Neverfield) da un giro a los acontecimientos.

Sin embargo, no es el último: tras los dos Danny Dalton, una figura surge entre la espesura que flanquea ambos lados del camino. Vestido únicamente con una bata de médico, un desorientado Billy Whitehouse encañona a todos los presentes.

Ben Braddock (sorpresa absoluta): ¿Bi...? ¿Billy? ¿Qué haces aquí?
Billy Whitehouse (encañonando a Danny Dalton II): Pregunta a este hijo de puta...

De nuevo, y mientras escucha las increíbles revelaciones de Danny Dalton II, Ben descubre una nueva faceta de éste que consideraba su mundo. Su hogar.

Danny Dalton II: En uno de esos mundos que visitamos había gente... con habilidades "especiales".
Danny Dalton: Nosotros también los conocimos. Y allí Billy...
Danny Dalton II: Billy era uno de esos "psíquicos", si. Lo cierto es que nos salvó la vida y vino con nosotros...
Marcus Vanister: Y nosotros... Oh. Dios. Mío. Ya lo entiendo...
Ben Braddock: Espere, profesor... ¿dice que éste Billy es de otra...?
Marcus Vanister: No, señor Braddock. Éste es nuestro Billy. Solo que le han implantado el ADN del otro Billy. Compatibilidad genética perfecta, claro...

Teniendo en cuenta que Morgan Kyle no tardará en descubrir lo que ha sido del convoy militar, nuestros protagonistas buscan cobijo en un lugar apartado: la vieja gasolinera del Viejo Peabbody, abandonada desde hace más de cinco años (desde el momento en que ésta versión de Springfield comenzó a prosperar)

Allí tiene lugar la primera separación: mientras Danny Dalton y Fred Fesster se marchan camino de la reserva Wakane (en busca del tercer viajero dimensional: Leonard Powell); Ben Braddock y Marcus Vanister se disponen a regresar a la boca del Lobo.

Y buscando redimir sus errores tras verse reflejado en el otro Danny venido del otro Neverfield; Danny Dalton II decide ayudar a nuestros protagonistas.

Danny Dalton II: La furgoneta está en los sótanos de la segunda Torre Powell, en el complejo industrial.
Ben Braddock: Y el prisma sigue dentro del coche que usted y Fred robaron, ¿no?
Marcus Vanister: El cual, con un poco de suerte, seguirá aparcado entre los almacenes de Industrias Powell.
Ben Braddock: Entraremos, cogeremos el prisma... y, con la ayuda de Danny, también la furgoneta.
Billy Whitehouse: Y a Leonard Powell.
Ben Braddock: ¿Qué?
Billy Whitehouse: Ben, ese año y pico que llevas pensando que yo estaba en Nueva York... ha sido un año y pico en el que me han hecho ni se sabe cuantos experimentos y mierdas médicas. Y alguien tiene que pagar por ello.
Ben Braddock: Si fueses el Billy que yo conocí, no buscarías venganza.
Billy Whitehouse: ¿Y qué buscaría, Ben?
Ben Braddock: Buscarías a Rachel.

Nuestros protagonistas tienen uniformes militares para hacerse pasar por soldados (y entrar en Industrias Powell escoltando a Danny Dalton II) Sin embargo necesitan un vehículo. Por eso, Ben llama a su viejo amigo Sam. Poco menos de una hora después, aparece Sam... a bordo del coche del padre de Ben. Y el propio "Big Ed" Braddock baja del vehículo. A pesar de las buenas intenciones de su padre, Ben Braddock sabe que él no puede hacer nada para ayudarles.

Por otro lado, también sabe que NUNCA se puede discutir con él... así que lo deja inconsciente de un culatazo.

Sam Wayne: Tío, Ben... ¡Es tu padre!
Ben Braddock: Llévale dentro. Mejor inconsciente que muerto.
Marcus Vanister: Tiene razón señor Wayne. A fin de cuentas, ya usted mejor que nadie sabe como las gasta Morgan Kyle.

Con un coche y los uniformes, nuestros protagonistas consiguen adentrarse en el corazón de Industrias Powell, el cual sigue tomada por los militares tras el reciente atentado Wakane. Sin embargo, y pese a recuperar con éxito el prisma, no tardan en ser descubiertos. Saltan las alarmas y Marcus Vanister pone en marcha un "sutil" plan de distracción... ¡empotrar un coche contra el acceso peatonal de la torre Powell!

Mientras Danny Dalton II lleva a Ben Braddock hasta los sótanos donde se encuentra "Margaret"; Billy Whitehouse sube hasta el ático. Allí se encuentra cara a cara con aquel al que considera responsable de su último año de infierno médico... Leonard Powell II. Empleándolo como escudo humano, Billy sale del edificio con su rehén ¡sólo para descubrir que Ben Braddock y Marcus Vanister se encuentran a bordo de "Margaret" y acorralados por todo un escuadrón de militares.

Billy "Whitehouse" (encañonando a Leonard): Di que nos dejen marchar o te vuelo la cabeza.
Leonard Powell II: Corre
Billy "Whitehouse: DI QUE BAJEN LAS ARMAS
Leonard Powell II: CORRE O MUERE

Y Billy corre.
A una velocidad sobrehumana.
Habiéndoles conseguido una ruta de escape, Ben Braddock y Marcus Vanister dejan atrás el complejo industrial a bordo de "Margaret".

Marcus Vanister: ¿Dónde está el señor Dalton?
Ben Braddock: Los hombres de Morgan lo mataron, profesor.
Marcus Vanister: ¿Y el señor Whitehouse?
Ben Braddock: No pienso regresar a por él.
Marcus Vanister (mirando por el espejo retrovisor): Creo que no será necesario.

Frenando la furgoneta, Ben y el profesor se quedan de piedra viendo a Billy detenerse justo delante de "Margaret".

Billy Whitehouse (visiblemente cansado): Y ahora, Ben... iremos a por Rachel.

De regreso a la vieja gasolinera, nuestros protagonistas descubren que alguien se les ha adelantado: no hay ni rastro ni de Sam Wayne ni de Ed Braddock. Buscando el rastro de sus captores aprovechando las últimas luces de la tarde, nuestros héroes descubren a alguien arrastrarse entre las praderas yermas que rodean la gasolinera.

Es Nora, la prometida de Ben. A juzgar por la sangre que mana de su estómago, Morgan Kyle no mentía cuando habló de ese dispositivo explosivo. La única opción de salvarla parece llevarla a un hospital a toda velocidad. Billy está dispuesto a hacerlo... como si eso fuese a servir de algo: apenas da un par de pasos en dirección al hospital más cercano. Billy es el primero en notar como la joven exhala su último aliento.

Nora Thompson muere con los últimos rayos de sol. Al caer la noche, Ben le da un funeral vikingo prendiendo fuego a la vieja gasolinera.

Ben Braddock (por teléfono): Es hora de acabar con esto, Leonard. Ven solo.

Una hora después, una lujosa berlina negra se detiene ante la (aun llameante) gasolinera. Leonard Powell hace acto de presencia y es víctima de una brutal paliza a manos de Ben Braddock. Para cuando descubre que es el Leonard que vino de otra dimensión, Leonard Powell II sale del coche empuñando un arma.

Leonard Powell II (encañonando a Ben): Como para fiarme de ti.
Ben Braddock: Y lo dice un Powell.

Y aprovechando el factor sorpresa, Billy Whitehouse noquea de un culatazo al segundo Leonard Powell.

Sabiendo que la gasolinera ya no es un lugar seguro, nuestros protagonistas deciden trasladarse al parking subterráneo del centro comercial Twin Palms. Antes, sin embargo, recogen a Rachel, la que fuese novia de Billy Whitehouse. Al menos en su caso, nuestros protagonistas se han adelantado a los militares.

Una vez en el parking de "Twin Palms", Billy aguarda dentro de "Margaret", poniéndose al día con Rachel y custodiando al (inconsciente) Leonard Powell "original". En la otra punta del parkin, dentro de la lujosa berlina negra; Ben y el profesor tienen una charla con el Leonard de éste mundo.

Ben Braddock: Escúchame Leonard. Billy te va a matar. Y si no nos ayudas a entrar en la mansión de tu padre... dejaré que lo haga.
Leonard Powell II: ¿Billy Whitehouse? A ese le faltan cojones para hacerlo...
Marcus Vanister: Sabe lo que le hizo a la señorita Wayne, señor Powell.
Ben Braddock (con desprecio): Billy sabe que violaste a Rachel, Leonard.

La mirada de temor que aparece en la cara de Leonard Powell II se ve interrumpida por la súbita aparición de Morgan Kyle y dos comandos completos de militares. El primero de ellos entra al asalto en el centro comercial. Por su parte, Morgan Kyle utiliza su jeep para bloquear la salida del parking, impidiendo la huida de nuestros protagonistas.

Morgan Kyle (parapetado tras su jeep y encañonando a Ed Braddock): Se acabó, chico. Si aprecias a tu padre... ríndete.

Ben sabe que no tiene opción... y pese a todo, intenta disparar contra Morgan. Consigue herirle en el hombro. Por desgracia, no basta: con un movimiento letal, Morgan rompe el cuello de Ed Braddock. Justo un segundo antes de que Billy Whitehouse acribille a tiros al propio Morgan.

De rodillas, con el cuerpo de su padre entre los brazos, Ben comienza a comprender que ha perdido a las dos personas que más le importaban. En menos de dos horas.

Mientras, a unos metros de distancia, los soldados disparan contra Billy y rodean la furgoneta. Por suerte, el profesor Vanister decide jugarse el todo por el todo...

Marcus Vanister (a los soldados, sujetando a Leonard Powell II): ¡Le volaré la cabeza! ¡Si se mueven, les juro que le vuelo la cabeza!

Aunque la treta del profesor surte efecto y consiguen salir de allí a bordo de "Margaret"; nuestros protagonistas se encuentran con un nuevo problema: Billy ha sufrido varias heridas de bala. Pierde mucha sangre y morirá sin remedio si no recibe tratamiento médico.

Ben Braddock (derrotado): Coja el prisma y ponga en marcha la furgoneta, profesor. Nos vamos en busca de un mundo mejor...
Leonard Powell (recuperando la consciencia): Y una mierda. Danny, Fred y yo vinimos en esta furgoneta. Y nos iremos en esta furgoneta. Vamos a rescatar a mis amigos. Y hazme caso, tío... Es la primera vez que uso la palabra amigo en mi puta vida.
Ben Braddock: Mira, Leonard... Sé que no ha sido culpa tuya. Pero he tenido un mal día.
Leonard Powell (mirando la herida de Billy): Si salvo a tu amigo... nos iremos. Todos.

Ben Braddock acepta y, por suerte para Danny Dalton y Fred Fesster, Leonard Powell consigue salvar la vida de Billy Whitehouse. Pero aprovechando la confusión, Rachel coge un arma y dispara en la cabeza a Leonard Powell II. Y acto seguido, se dispone a disparar contra el Leonard original.

Ben Braddock (interponiéndose entre el cañón del arma y Leonard): Rachel, no... Tranquila. Tranquila...
Billy Whitehouse: No se lo reprocho. Era un hijo de puta.
Leonard Powell (aun sobresaltado, mirándose a sí mismo... y manchado por su propia sangre): Joder...

Con la muerte de Leonard Powell II, el rescate de Danny Dalton y Fred Fesster se complica. Han perdido su mejor baza para entrar en la mansión Powell.

Billy Whitehouse: Os acompaño. Si lo que has contado es cierto y están enviando máquinas de salto dimensional a saquear otros mundos... Joder, Ben. No puedo dejar que vuelvan a hacerle a alguien lo que me hicieron a mí.
Ben Braddock: No, Billy. Llévate a Rachel lejos de aquí. Créeme, es lo que yo haría... si fuese Nora.

Ben se despide de Billy, asegurándole que si todo sale bien, se verán en el primer partido que celebren los Patriots en la próxima temporada.

Ben Braddock (a bordo de "Margaret" y rumbo a la mansión Powell): Leonard, decías que de donde vienes soy una especie de héroe de instituto, ¿verdad?
Leonard Powell: Si. Una especie de héroe.
Ben Braddock (mortalmente serio): No en éste mundo.

Y con el amanecer de fondo, nuestros protagonistas se lanzan al definitivo ajuste de cuentas.

CONTINUARÁ...

1 comentario:

Darrell dijo...

juas, estuvo mu chula. Hubo un momento que los personajes originales estuvieron a punto de quedarse en tierra, o sea en esa dimension ;P.

ala, estare atento al desenlace final.

por cierto, tengo previsto bajar a cadiz el finde del 21-22 de junio.

no digo na XD